El don del Espíritu para los apóstoles
- Categoría: Meditaciones sobre la fe
Los apóstoles, totalmente pobres, desposeídos ya de todo, sin un signo visible de la presencia humana de Cristo, esperan junto con María en el Cenáculo. Y es entonces cuando, despojados, sumidos en el vacío, desciende hasta ellos el Espíritu Santo; quien, como dice la liturgia, es el Padre de los pobres. Entonces los invade su poder. Y, fortalecidos de esa manera, son enviados a la conquista del mundo para Cristo.