10 minutos con Jesús: La oveja perdida
Hay más alegría en el cielo por un pecador que se convierta que por noventa y nueve justos que no necesitan conversión.
Gracias a la generosidad de nuestros bienhechores, hemos podido seguir hasta ahora. Pero las exigencias van siempre en aumento y con frecuencia surgen gastos imprevistos, como reparaciones, adquisición de nuevas máquinas, etc.
Más información aquí.